El constructor Antonio Plasencia, condenado por el caso de la extracción de áridos en Güímar y más recientemente por el caso Las Teresitas, ya ha presentado ante el Ministerio del Interior e Instituciones Penitenciarias los planos de «Tenerife II Luxury Resort and Private Apartments», un pabellón aparte en la cárcel tinerfeña especialmente diseñado para la larga e ilustre lista de condenados en este último caso, entre ellos el ex alcalde de Santa Cruz Miguel Zerolo. El constructor espera ganar el concurso público que aún no se ha convocado para cubrir con ese dinero las diversas reparaciones que adeuda a la Hacienda pública.
Fuentes cercanas a Promotora Punta Larga aseguran que «la excepcional tranquilidad del entorno y las muchas medidas de seguridad del recinto lo convierten en el espacio ideal para la relajación y la reflexión pausada sobre los errores de la vida y los chanchullos de la gestión pública, y creemos que eso debe hacerse desde el confort de una habitación propia, bien equipada, con privacidad, que no haya que compartir con un laja de Ofra al que jamás se le hubiera ocurrido tasar el frente de playa por el triple de lo que realmente vale».
Otra opción que está sobre la mesa es venderle al Ministerio el edificio de Cabo Llanos que estuvo a punto de comprar el Cabildo el pasado mes de diciembre, demostrando así la flexibilidad de una infraestructura que lo mismo puede albergar oficinas, como camas de alto requerimiento para personas dependientes, como celdas para delincuentes de la Administración, una polivalencia que desde la empresa lamentan que nadie valore.
