El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife rindió homenaje en el día de ayer a un conductor que, la semana pasada, fue desde la piscina municipal Acidalio Lorenzo hasta la Comandancia Marina con todos los semáforos abiertos, logrando ejecutar esta proeza en un tiempo de 5 minutos y 32 segundos, sin sobrepasar el límite de velocidad. Según atestiguan las cámaras municipales, el afortunado conductor, de nombre Ramón Sánchez, recorrió la avenida de Asuncionistas y la Rambla de Santa Cruz con total placidez y sin contratiempos.
En un sencillo acto en la Casa Consistorial, al que asistieron el alcalde y la concejala de Seguridad Evelyn Alonso, Sánchez confesó que, tras encontrar aparcamiento en apenas unos minutos en la zona de Residencial Anaga, «lo primero que hice fue buscar un estanco para echar una Primitiva, porque entendí que los astros claramente se había alineado a mi favor y que si era mi día de suerte, había que exprimirlo hasta el final». De hecho, en el sorteo fue agraciado con tres aciertos, lo que según este conductor le hizo pensar que «tampoco hay que abusar de la fortuna, fue la lección que aprendí ese día».
El alcalde José Manuel Bermúdez destacó el ejemplo de Ramón Sánchez como motivación «para superar las dificultades, para ver el lado bueno de la vida, para darnos cuenta de que Santa Cruz es una ciudad que, aun sin Carnaval, puede ofrecernos alegrías inesperadas», y adelantó que el cronista oficial de la ciudad incorporará este suceso en la relación de hechos notables acaecidos en el término municipal de los últimos 500 años. Por último, la concejala Alonso también quiso señalar que «si un acontecimiento como éste puede darse en Santa Cruz es porque, sobre todo gracias a mí, no somos una dictadura narcochavista con sus atascos de tráfico y su inseguridad; en Caracas casi nadie para en los semáforos para no ser asesinado, miedo que los chicharreros no conocen».
Ramón Sánchez fue obsequiado con una placa conmemorativa y dos entradas gratis al Museo del Carnaval.