Las fuertes críticas a la desaparición de los contenidos de Geografía e Historia de Canarias en el currículo de la ESO tras la aprobación de la reforma educativa han resonado con dureza en la Consejería de Educación, que anuncia ahora una rectificación a lo ya previsto. Si en el «borrador» presentado hace pocos días, estos contenidos perdían su carácter obligatorio para 4º de la ESO y pasaban a ser optativos en 3º, ahora la Consejería señala que volverán a ser obligatorios, pero Historia de Canarias sólo se impartirá en el periodo que va desde 2019, fecha de las elecciones que llevaron al poder al socialista Ángel Víctor Torres, hasta la actualidad.
Desde la Dirección General de Ordenación Educativa se señala que «para que el alumnado tenga un conocimiento actualizado del mundo en el que vive no es necesario retrotraerse a épocas pretéritas, todo lo que necesitan saber pueden condensarse desde el 2019 hasta el día de hoy, porque además ha sido un periodo intenso plagado de hechos relevantes: quiebra de Thomas Cook, incendios, pandemia, crisis migratoria, el volcán de Cumbre Vieja, lo que le pasó a Blas Acosta, el caso Laycas en La Laguna…». Estas mismas fuentes auguran «exámenes muy duros, porque hay muchas dinámicas históricas que comprender y muchos datos que recordar». Preguntadas sobre la pertinencia de impartir también contenidos relacionados con la época prehispánica, la conquista, la emigración a América, los puertos francos, la Segunda República, la dictadura, la Transición o la democracia, la Dirección General explica que «todo eso quedará agrupado en un breve epígrafe introductorio titulado La época de las tinieblas, y listo».
No menos polémica que esta propuesta es otra que le acompaña, según la cual esta asignatura de «Historia de Canarias desde 2019 hasta la actualidad» no será impartida por docentes de la rama de Historia sino por asesores del Gobierno de Canarias. «Son muchísimos y la mayoría no está muy agobiado de trabajo, así que no van a faltar profesores para dar estos contenidos a los alumnos, teniendo en cuenta además que son quienes mejor lo conocen», señalan desde la consejería, que lo ha calificado como «un win-win».