Con el alza imparable del precio de los combustibles, cada vez más canarios se plantean la posibilidad de abandonar el uso del vehículo particular y «coger la guagua», pero ¿qué sabemos realmente de este medio de transporte? ¿Es barato o caro, eficiente o ineficiente, seguro o inseguro? En este reportaje damos todas las claves para resolver estas dudas.
Las he oído nombrar pero, ¿qué es exactamente una guagua?
Es un vehículo de gran tamaño, para el caso que nos ocupa operado por una compañía pública, diferente en cada Isla, que puede transportar a varias decenas de personas al mismo tiempo, desde un punto A hasta un punto B, con paradas en puntos intermedios. Son de diferentes colores pero suelen llevar el logo de alguna Administración pública, lo que hace más fácil diferenciarlas de las privadas, que suelen llevar los apellidos de los dueños.
¿Cuánto cuesta una guagua?
El vehículo en sí cuesta mucho dinero pero, por suerte, el precio del billete es más asequible aunque dependerá, claro, del punto de partida y el de destino. Si uno va a ser pasajero habitual, esto es, si va a coger la guagua más de dos veces, le renta comprar lo que se llama «un bono», un documento prepagado que permite utilizar el transporte en varias ocasiones o por un tiempo determinado, con interesantes descuentos. Los precios varían en función del recorrido y de si éste es urbano o interurbano. Puede ser un poco lioso pero no olviden nunca que ir al Sur, en Tenerife o Gran Canaria, en guagua, es mal negocio. Alguna familia ha salido arruinada por apostar por la movilidad sostenible para un día de playa.
¿Es eficiente la guagua como medio de transporte?
Eso depende de lo que usted entienda por eficiente, o de la prisa que tenga. No olvide que la guagua no pasará por la parada (lugares ya prefijados en los que carga y descarga pasajeros) cuando usted lo necesite, sino cuando el Oráculo del Transporte lo dictamine. El Oráculo del Transporte es una fuerza arcana, oscura y poderosa que los gestores de Movilidad de las diferentes administraciones convocan periódicamente mediante ritos secretos, y que fija el intervalo de tiempo en el que pasará la guagua, que normalmente tenderá hacia la aleatoriedad y el caos, como el Universo. En cualquier caso, haga un cálculo de la distancia que va a recorrer, consulte el estado del tráfico en Internet, encienda algunas velas al santo de su elección y añádale 40 minutos al resultado. Con eso debería ser suficiente tiempo.
¿Por qué la guagua no me deja justo en la puerta de donde quiero ir? ¿No es tercermundista tener que caminar?
En la mentalidad canaria, no llegar en vehículo motorizado hasta la misma puerta de donde quiero desplazarme no suele ser una opción respetable. Años de uso desaforado del vehículo privado han instalado en el imaginario colectivo una especie de derecho a ello. Pero el transporte público no puede garantizar el ejercicio de este derecho a cada ciudadano. Puede darse la circunstancia de que, casualmente, la parada quede justo donde usted quiere ir, pero la mayoría de las veces no es así y hay que estar mentalizado y físicamente preparado para recorrer 100 o 200 metros.
¿Cómo es ir en la guagua?
A decir de muchos, es una experiencia sensorial que nos sumerge en un interesante mosaico humano. Tenga en cuenta que habrá de compartir espacio con más de cuatro personas, que es lo máximo que cabe en su coche (9 si es un monovolumen) y a menudo en condiciones de hacinamiento. Además, las guaguas modernas (las eléctricas o híbridas) incorporan un diseño cada vez más minimalista y con menos asientos, aunque a cambio disponen de puertos USB para que puedas ir cargando tus dispositivos durante el trayecto.
Un momento, ¿entonces tendré que ir de pie?
A veces sí.
Pero si hay asientos disponibles, ¿esperará el chófer a que me siente antes de arrancar para minimizar el riesgo de una caída?
Sólo hay una forma de averiguarlo.
¿Es seguro ir en guagua?
Las guaguas tienen un bajo índice de siniestralidad en las Islas, si bien hace poco se incendió una en Arucas, por suerte sin consecuencias. Cabe destacar que los incidentes a bordo de la guagua no son motivo para la devolución del importe del billete.
¿Cuál es la mejor compañía para ir en guagua en Canarias?
Nos conmueve su inocencia. En el transporte público en las Islas, el concepto «mercado competitivo» no ha penetrado aún ni parece que vaya a hacerlo. De modo que no tiene sentido hacer comparativas porque hay que ir en la que te toque según tu zona de residencia.