La guardia civil desarticuló este fin de semana una red de tráfico de personas que introducía inmigrantes ilegales bajo la apariencia de envíos de una empresa de telefonía móvil.
El pasado sábado se detectó en el aeropuerto de Tenerife norte un envío procedente de Corea del Sur cuya nota de carga señalaba que se trataba de terminales telefónicos del modelo samsung Galaxy Note II, algo que levantó las sospechas de los agentes ya que actualmente lo que parece estar mas de moda es el nuevo modelo del iPhone de Apple.
Se procedió a interceptar el paquete y revisar el contenido, momento en el que, para sorpresa de los agentes, se descubrió que bajo la amplia pantalla de 5’5″ se escondían varios ciudadanos de orígen asiático que, aprovechando la amplitud de la misma, viajaban ocultos en las cajas.
El operativo continuó y, tras revisar cada terminal, varios miembros del servicio aduanero se introdujeron de nuevo en los teléfonos para poder detener a los receptores de la mercancía en el momento en el que fueran a recoger el paquete, algo que se produjo horas mas tarde y que llevó a la detención de los cabecillas de la red, los cuales negaron que se tratase de personas en situación ilegal y argumentaron que simplemente se trataba de los primeros prototipos que incorporaban un asistente, para competir con el que incluye el sistema operativo de Apple, y que poco a poco se iría perfeccionando hasta ser sustituido por uno electrónico.
Tras tomarles declaración, miembros de la división informática del servicio de aduanas encendieron uno de los terminales para verificar la historia aportada por los detenidos, comprobando enseguida que los presuntos asistentes ni entendían lo que se les preguntaba ni acertaban a dar respuestas lógicas a las peticiones mas usuales, motivo por el cual se procedió también a detenerles.
Aunque no hay pruebas para sospechar que este hecho se haya podido repetir en anteriores ocasiones, las autoridades avisan para que los poseedores de algún terminal telefónico de este modelo comprueben que sus móviles no oculten nada, prestando especial atención si perciben que el peso del teléfono supera los 50 kg o si al activar el modo vibración se escucha alguna risa.