En su constante e incansable labor por hacer de la isla picuda un destino turístico atractivo para los visitantes, Turismo de Tenerife ha lanzado una sorprendente campaña que juega con una baza prácticamente indestructible: la nostalgia.
El alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, ha sabido subirse a la ola de la actualidad para proponer una figura imparcial que medie entre el jurado y las murgas durante la fase final del concurso. La posibilidad de revisar las letras y gestos polémicos con un VAR también está sobre la mesa.
A finales de enero tuvo lugar en Tacoronte la cena de presentación del partido de Casimiro Curbelo en la isla de Tenerife. Ya al final del evento el partido se había escindido en dos corrientes, la oficial y la crítica, que mantienen una soterrada e inútil lucha por el poder.
Esta inusual guía de viajes es la ópera prima de Remedios Gómez, una funcionaria pre-jubilada del Ayuntamiento de Tijarafe, que ha decidido poner negro sobre blanco sus experiencias viajeras, obtenidas durante sus vacaciones de los últimos años. El título escogido es, desde luego, de los que llaman la atención.
Según fuentes cercanas, la ahora ex concejala Castañeda habría cambiado su puesto en el Consistorio por una ocupación centrada en el mundo de las ciencias alternativas: el chamanismo.
José Luis Arminda, un joven veinteañero oriundo de Zamora, afirma haber sido engatusado en Fitur por el stand de Puerto de la Cruz, a donde ha ido a pasar sus vacaciones y ha encontrado un panorama muy diferente del desfase que le habían asegurado que encontraría.
Una carta que permanecía oculta en los almacenes de la Biblioteca Nacional acaba de ser atribuida de forma inequívoca al escritor grancanario Benito Pérez Galdós, si bien investigadores y estudiosos de su obra se hallan desconcertados por la presencia de esta coloquial expresión en la misiva.