«Voy a llegar hasta el final». Con estas palabras, en un tono muy solemne, Santiago Pérez ha informado a la prensa de la demanda que ha interpuesto contra sí mismo en los juzgados de La Laguna, exigiendo a la Fiscalía que le investigue. El veterano político lagunero argumenta que «alguien como yo, que lleva tantos años en la política local de San Cristóbal de La Laguna, no puede no tener algo turbio, y creo que ya es hora de que la Fiscalía deje de mirar para otro lado y me investigue, con luz y taquígrafos. No tengo nada que esconder y es hora de que la Fiscalía averigüe si tengo algo que esconder».
Esta nueva jugada judicial de Santiago Pérez ha sumido a sus adversarios políticos en el desconcierto y también en la hilaridad, pero eso no desanima al que fuera senador por el PSOE. De hecho, ha sido tajante al afirmar que «quiero dejar claro que aquí no cabe el principio in dubio pro reo y que estaremos muy atentos a cualquier actuación del juez, un juez que, según hemos podido saber, la mañana del 28 de noviembre de 1989 se tomó un leche y leche en un bar de Finca Pacho en el que en ese momento desayunaba Elfidio Alonso con un sobrino suyo. ¿Casualidad? No lo creo». Pérez también ha aprovechado las circunstancias para lanzar un dardo a Fernando Clavijo, ex alcalde de la ciudad y actual presidente del Gobierno de Canarias: «el caso Grúas podría haber terminado hace mucho si Clavijo se hubiera denunciado a sí mismo, pero si no lo hace, algún motivo oculto habrá de tener».
Por otra parte, con la presentación del nuevo partido de Santiago Pérez, Avante La Laguna, y el de Javier Abreu, Nivaria, la ciudad de Los Adelantados alcanza ya la misma densidad por habitante de partidos locales que de bares, según un estudio de la Dirección General de Comercio del Gobierno de Canarias.