«Muerto el perro se acabó la rabia», parece pensar Antonio Nuño, experto en Gestión Forestal de la Universidad de La Laguna, tras declarar que la única forma eficaz de acabar con los incendios en nuestro archipiélago sería eliminar por completo las masas forestales que peligrosamente se extienden por la superficie de Canarias. Según fuentes a las que ha tenido acceso El Baifo Ilustrado, el Cabildo de Tenerife podría contemplar con buenos ojos esta iniciativa e incluso se rumorea que podría estar estudiando iniciar la campaña «El árbol que no existe no se quema». La idea contemplaría que cada ciudadano provisto de motosierras, hachas o cualquier herramienta de corte, disfrute de un fin de semana acabando con esas cosas peligrosas llamadas árboles y que tantos problemas están ocasionando en la tranquila vida de las islas.
