El pleno del Cabildo de Tenerife ha acordado presentar una propuesta al Parlamento de Canarias para que le sea concedido el Premio Canarias a la Labor Social a una farola de la capital chicharrera.
El texto, presentado a instancias de una iniciativa popular, recoge una investigación llevada a cabo durante los últimos 3 años y cuenta con numerosos testimonios que avalarían la concesión de este premio a la citada farola, que ha servido de soporte a cientos de anuncios diversos que han promovido y fomentado la actividad económica y social de muchos ciudadanos de Santa Cruz.
La farola en cuestión, cuya ubicación exacta no ha querido ser revelada para evitar con ello alterar el normal funcionamiento de la obra social que desempeña, se sabe que fue adquirida por el Ayuntamiento de la ciudad a finales de 2005 y entró en funcionamiento durante el verano de 2006. De apariencia exacta a todas las demás de su serie, comenzó muy pronto a hacerse popular entre los viandantes, que aprovechaban para pegar en ella anuncios de toda clase, tal y como sucede en la gran mayoría de las luminarias que conforman la red urbana.
Sin embargo, algo tenía esa farola que, por una extraña razón, conseguía mejores resultados que el resto.
Del informe presentado al Cabildo por parte de la Asociación de Amigos de las Farolas, y al que ha tenido acceso El Baifo Ilustrado, se desprenden numerosos testimonios que, con nombre y apellidos, dan fe de la utilidad pública del citado elemento:
«Yo puse un anuncio en el que me ofrecía para pintar pisos a buen precio… y al cabo de 2 meses tuve que contratar a 2 pintores mas porque no daba a basto para cumplir los encargos» (A.L.R. )
«Alquilaba una habitación pequeña de mi casa para llegar a fin de mes. Pensaba que, con suerte, me acabaría llamando alguien de paso por la ciudad o algún inmigrante al que le costaba encontrar vivienda por no tener papeles. Pero no fue así. A las 3 semanas apareció en el piso una chica sueca, modelo, que buscaba un alojamiento compartido para aprender el idioma más rápidamente. Estuvo allí casi 2 años. Era muy cariñosa» (J.A.D.G. )
«Me encontraba muy sólo y al pasar por la farola vi el anuncio de un Maestro Brujo que aseguraba que arreglaba los temas de pareja. Llamé y me desviaron la llamada a un 906. Me vino una factura enorme y cuando fui a protestar a la tienda donde me había dado de alta conocí a la que ahora es mi esposa. El dinero no lo recuperé, claro» (M.G.H.)
«A mi realmente no me pasó nada… pero siempre noté un extraño magnetismo cuando pasaba por delante. Creo que esa farola es el espíritu reencarnado de algún trabajador social» (S.F.J.)
Hasta el fallo de los premios, se espera guardar en secreto la localización de la farola, pero, de resultar agraciada con esa noble distinción, el Ayuntamiento procederá a vallar su perímetro y colocarla sobre un pedestal donde una placa informe de sus méritos, aunque tampoco se descarta que sea reubicada en algún lugar emblemático de la ciudad y que, al fin de su vida útil, sea convertida en monumento histórico para el disfrute y contemplación de todos los santacruceros que deseen mostrar su agradecimiento.
«Ella así lo querría» comentaba a nuestro reportero el propio alcalde de la ciudad, quien ha asegurado que desde el consistorio se trabaja para conseguir el reconocimiento a este objeto entrañable que ya fue considerado en 2012, por el suplemento dominical de uno de los periódicos de la provincia, como unas de las 10 personas o cosas mas influyentes de la capital.