Una de las iniciativas más polémicas de Ciudadanos ha sido, sin ningún género de dudas, su propuesta de legalizar y dar por buenos los contratos de maternidad subrogada o vientres de alquiler. Esta propuesta ha generado constantes debates entre defensores y detractores de esta práctica, que unos consideran expresión de libertad y otros una inaceptable cosificación de las mujeres. Ante esta irreductibilidad de posiciones, la formación naranja ha decidido adoptar una posición arriesgada: las militantes femeninas que ostenten cargo se pondrán a disposición de quienes deseen alquilar sus vientres.
El promotor de esta iniciativa es Raimundo Corona, militante de Ciudadanos y miembro de la asociación “Segundo de los Siete”, un colectivo de defensores de la regulación permisiva de la maternidad subrogada radicado en Tenerife. Una vez en contacto con él, nos expone claramente su postura: “En nuestro grupo, creemos firmemente en el derecho a tener hijos biológicos. No queremos someternos al largo, lento y tedioso proceso de adopción y, por decirlo francamente, queremos descendencia con nuestra propia sangre. Por eso yo, como militante activo de Ciudadanos, he decidido aprovechar mi posición para promover una iniciativa que convenza definitivamente a la sociedad de que la postura de mi partido es la correcta. Ser un vientre de alquiler es una elección personal y plenamente libre; no tiene nada que ver con asuntos como el dinero, la necesidad o la posición social.”
En la propuesta del señor Corona, toda militante femenina de la formación naranja que ostente un cargo público, estará disponible para prestar en alquiler su vientre. Dado el origen tinerfeño de la iniciativa, será la ciudad de La Laguna la primera en introducir este programa, que su promotor considera pionero.
Interpelado por este reportero acerca de las implicaciones sexistas de una iniciativa de esta naturaleza, el promotor indicó que habría un programa paralelo de donación de semen, a cargo de los cargos públicos masculinos de ciudadanos. Sin embargo, ha advertido igualmente que el acceso al material genético de Rivera supondrá el desembolso de un generoso óbolo por parte de las personas interesadas.