Un error en la traducción de la receta, de «piña de maíz» a «pineapple and corn», ha llevado al conocido chef británico Jaime Oliver a presentar en una feria gastronómica de Londres un escaldón canario con piña tropical. Si ya le sucedió hace un meses con su ‘paella con chorizo’, ahora son los puristas del escaldón los que exigen su cabeza al sentirse ofendidos con una receta que distorsiona por completo el sabor y el espíritu de este tradicional plato.
Oliver ha explicado en un comunicado que «no pretendía dañar a nadie, sólo honrar la tierra en la que mis padres pasan muchas vacaciones; van a Los Abrigos y a Adeje y luego se van de excursión al norte». El cocinero asegura que «es un plato rico y nutritivo que en mi Essex natal triunfaría, porque hace mucho frío en invierno; espero que después del Brexit podamos seguir importando gofio a un precio razonable».
Estas explicaciones no han convencido a los críticos gastronómicos canarios. De hecho, uno de los periodistas más entregados a esta materia, Juan Carlos Marrero, abandonó el habitual tono amable y extremadamente lisonjero de sus columnas para exigir que «cojan a ese desgraciado hijo de puta y lo cuelguen de los huevos por mancillar el honor de los canarios con esa aberración culinaria», añadiendo que le rezaría al Cristo de La Laguna para ver cumplido su deseo.
No obstante, en la última línea de su artículo añadió que «si Oliver me lleva a sus restaurantes en Londres, lo podemos hablar con calma».