Un exhausto Santiago Negrín compareció ayer brevemente en la Comisión de Control de RTVC del Parlamento de Canarias para reconocer que es él quien se está encargando de transportar y distribuir la señal de la Televisión Canaria a los hogares de las Islas, evitando así el cese de las emisiones tras el fin del contrato que estaba vigente hasta el pasado 31 de diciembre. El presidente del ente público recoge la señal cada semana y la reparte por las Islas, de forma que llegue a los hogares canarios y se mantenga la programación.
Hasta ahora, TVC se había negado a explicar los términos del procedimiento por el cual se seguía distribuyendo la señal, alegando que era un asunto interno del que no se tenía que informar. Ahora se sabe que ese mutismo se debía al hecho de que ningún otro canal autonómico tiene al presidente transportando la señal personalmente. Cada lunes y martes, ha explicado Negrín, él mismo recoge la señal en los estudios de las islas capitalinas y la distribuye usando su vehículo particular. «Gracias a nuestros sofisticados audímetros sabemos en qué casas se ve la programación de Televisión Canaria, y a ellas es a donde estoy llevando la señal; es absurdo llevarla a todas las casas, cuando en muchas no se aprecia el cine del Oeste al mediodía o las investigaciones de Noveleros«, aseguró el presidente, quien añadió que esto está teniendo un coste mínimo para el erario público dado que «el avión ya me lo pagaban y sólo estoy pasando los tickets de la gasolina».
Santiago Negrín usa el resto del tiempo que tiene libre como presidente para perfilar los nuevos concursos de Televisión Canaria y tratar de conservar el puesto, esquivando los dardos que se le tiran desde diferentes medios y partidos políticos, algunos de ellos literales, a través de la ventana de su despacho.
que mal escribe usted y por dios, cámbiese esa foto