La consejera de Sanidad del Cabildo de La Palma, Susana Machín, ha elevado su desafío al PSOE canario inyectándose una tercera dosis de la vacuna contra el coronavirus. La consejera, según concluyó un informe de la Consejería de Sanidad del Gobierno autonómico, fue incluida en el proceso de vacunación de forma indebida, esto es, adelantó su turno por orden expresa del director médico del Centro Sociosanitario Hospital Nuestra Señora de los Dolores, centro dependiente del Cabildo de La Palma, aunque no formaba parte de los grupos prioritarios. El PSOE pidió su dimisión pero la consejera anunció desde el primer momento que no iba a renunciar a su cargo.
Machín salió del centro de salud donde se le administró la tercera dosis a primera hora de la mañana en tono retador, asegurando a la prensa allí congregada que «al que me diga algo, le mando a Anselmo [Pestana] y lo revienta, mi inca Pestana no se anda con chingaderas, vacuna o plomo». La consejera no descarta seguir acumulando dosis de la vacuna hasta que el PSOE canario le cierre el expediente que le abrió hace casi un mes, mientras señala que continuará en su puesto como consejera de Sanidad, Artesanía y Educación «porque son áreas que me necesitan, si no estoy yo a ver quién gestiona todo eso, ¿Coalición? ¿El PP? No me haga reír, voy a meterme todas las agujas que hagan falta para salvar el pacto insular, como si tengo que convertirme en Hellraiser».
Por su parte, el PSOE a nivel regional se encuentra desesperado. La vicesecretaria de Acción Electoral y presidenta del Grupo Parlamentario, Nira Fierro, explica que «desde el partido hemos intentado ya todo, que es prácticamente no hacer nada, y no ha servido, dentro de los cauces legales ya no sabemos qué más hacer, quizás pedir la dimisión un poquito más fuerte pero vamos, aparte de eso, tenemos las manos atadas», al tiempo que reconoce que «lo de colar a Santiago Pérez en el Senado ahora mismo nos tiene ocupados full-time, y estas cosas hay que abordarlas de una en una».
