El cierre de las playas en el municipio de Candelaria debido a la aparición en reiteradas ocasiones de manchas de hidrocarburos ha generado intranquilidad entre los vecinos; sin embargo, el Ayuntamiento, haciendo gala de la mentalidad de convertir las crisis en oportunidades, se ha apresurado a licitar, por la vía de urgencia, la construcción de varias gasolineras a pie de playa, que recogerán la materia prima del mar, la someterán a un tratamiento exprés y la venderán a un atractivo precio, generando así más ingresos para el Consistorio.
La alcaldesa, Mari Brito, explicó que «habíamos detectado que algunos vecinos se estaban llevando el piche para refinarlo y convertirlo en combustible en sus propios hogares; esto no sólo es peligroso sino que es un hurto de recursos públicos, ya que si el mar echó esos hidrocarburos a nuestra costa, es para que los explotemos todos los candelarieros». Por ese motivo, Brito anunció la instalación de una primera gasolinera en la playa de Las Caletillas, «donde operarios municipales recogerán los hidrocarburos, los convertirán en gasolina de 98 octanos y la venderán a los ciudadanos por garrafas». Los compradores que estén empadronados en el municipio podrán disfrutar un 15% de descuento con la tarjeta «Morenita del Piche».
Para el Ayuntamiento, esta iniciativa es una muestra del compromiso de la Administración con la economía sostenible y el uso racional de los recursos marinos, o como en este caso, que vienen de alguna parte del mar. Si las gasolineras a pie de playa tienen éxito, el Consistorio podría solicitar que deje de investigarse el origen del vertido.
El excedente que no se pueda vender irá destinado a alimentar las turbinas de la central térmica de Caletillas.
