El vicepresidente primero del cabildo conejero se convierte en un juguete

La industria juguetera vive esperando estas fechas que son tan especiales para los más pequeños de la casa. Anuncios como el de las muñecas de Famosa que se dirigen al portal son ya tan parte de nuestra Navidad como las pambufetas en Nochebuena, los desfases de Nochevieja o los propósitos de Año Nuevo que jamás se cumplirán. Sin embargo, los responsables de este pujante sector de la economía española son conscientes de que el favor infantil puede ganarse o perderse en función de las circunstancias que rodeen al juguete de turno, de ahí que un emporio del ramo haya decidido hacer un producto adaptado a un concreto mercado insular como es el lanzaroteño. El resultado ha sido Jaco Manitas, un muñeco basado en el vicepresidente primero del Cabildo del Lanzarote.

La responsable de este singular juguete es la empresa Consorcio Educativo Jocoso, S. A. -CONEJOSA- cuya sede principal está sita en Arrecife y cuya jefa de comunicación, Dominga González, nos explica las características de este juguete, llamado a entretener a los más pequeños de cada casa: “Hace unos causó sensación en los canales de Disney una serie protagonizada por un habilidoso chapuzas que respondía al nombre de Manny Manitas. Un producto educativo que, de paso, sirvió para colocar, todavía hoy, muchísimo merchandising: muñecos de todo tipo con sus complementos, cajas de herramientas, cuentos… nosotros decidimos seguir el ejemplo de la competencia y adaptar este concepto a la realidad lanzaroteña. Como tenemos a Jacobo Medina, un político que ha alcanzado mucha visibilidad visitando obras públicas de todo tipo y comentándolas en sus redes, pensamos que ésta era la mejor manera de hacer un Manny a la conejera.”

Jaco Manitas se presenta con su correspondiente uniforme, compuesto por camisa blanca, pantalón claro y zapatos de vestir, rematados por un chaleco reflectante y un casco de obrero que puede ser complementado o sustituido por un gorrito de Papá Noel a juego con el amarillo chillón del chaleco. Llevará también un maletín de herramientas parlantes, al igual que su fuente de inspiración, pero adaptadas a su particular idiosincrasia: varios boletines oficiales, una copia de la ley de contratos del Estado, un móvil permanentemente conectado a Instagram y un bote de dentífrico para lucir una perpetua sonrisa de Signal conformarán el primer set de periféricos del muñeco.

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