«Tenerife debe segregarse de Canarias y unirse a Venezuela»

El filósofo y pensador enfaticalista moderado Charles Brute ha abierto una nueva página en la historia del pleito insular, del independentismo canario y de las relaciones con Latinoamérica al proponer la segregación de Tenerife del resto del archipiélago y su unión con Venezuela.

Brute es un rubicundo galés que se estableció en Gran Canaria cuando la Unión Deportiva fichó a Vinny Samways. Chahlie, como le conocen por la zona de las Canteras por la que reside, intentó probar suerte en las categorías inferiores del club amarillo sin mucho éxito. Enamorado del clima, las playas y la baratura de las bebidas espirituosas decidió establecerse y licenciarse en Filosofía por la UNED, estudios que compaginó con trabajos como la traducción de letras murgueras al inglés (en el marco del programa de internacionalización del carnaval Do you know me, littlemask? promovido por el Cabildo de Gran Canaria)

Brute presentó su ensayo Arepa en pepitoria en la sala de conferencias del círculo de amistad “Vin Diesel” del Confital. Durante el acto expresó que esa obra contenía su visión de las Canarias que confesó para estupor de los allí reunidos era plena coincidente con el ideario de los editoriales de El Día.

Don Pepito tiene razón

Brute empezó diciendo que desde su punto de vista el propietario-director-pensador-gran timonel del periódico santacrucero tenía razón al plantear la independencia. Después de unos titubeantes inicios en los que era difícil acallar el murmullo del respetable y en los que don Charles se trabucó al ser incapaz de decantarse entre “Don Josesteban”, “Don Pepito” o “el señor Apagaluz” para referirse al responsable de la publicación, el filósofo expresó los motivos de esa adherencia que, añadió, no era integral:

“Los editoriales de esa publicación hablan de independencia y atacan a Gran Canaria. Yo les doy la razón: no podemos seguir manteniendo esta unidad artificial y falsa, por lo que desde aquí propongo que Tenerife se segregue del resto del archipiélago y sea plenamente independiente. Las diferencias son demasiado profundas y considero que la sociedad de la isla picuda está más próxima a otras colectividades que a nuehtra”.

Brute, que intenta compensar su cerrado acento galés con la profusión de grancanarismos como “tohtohrotah” o “yash conyo” (siempre con su inimitable pronunciación) indicó que en sus viajes a Tenerife ha detectado muchas semejanzas con la sociedad venezolana. “Hay muchas areperas, en las fiestas típicas se baila mucha salsa y hay mucho gusto por todo lo que forma parte de lo que yo llamo venezonalismo identitario sociológico: el reguetón, las telenovelas, el hecho de ser lugar de desembarco de artistas latinos en sus inicios… El hecho de que se vaya a rodar The fast and the furious 6 por allí fue lo que me movió a escribir este ensayo”.

Varias opciones políticas

Brute terminó indicando que Tenerife podría ser perfectamente un Estado asociado a Venezuela, lo que sería la culminación de las reivindicaciones de los citados editoriales. Sin embargo, abogó por una unión más profunda y duradera en la forma de unos “Estados Unidos de Tenezuela” o “Confederación de Venerife”.