Santa Cruz de Tenerife contará antes de final de año con su primer Centro de Salud del Carnaval, una infraestructura sanitaria enteramente ambientada en la principal fiesta de la capital y que se ubicará en el entorno del Museo del Carnaval y el futuro Parque del Carnaval, en el barranco de Santos, una zona de la ciudad denominada por los urbanistas el «kilómetro cero» del proceso carnavalista en el que, poco a poco, se envuelve la misma. Este consultorio contará con atención primaria, enfermería, analíticas, pediatría y obstetricia, todo en un entorno de belleza y simpatía, con decoración alusiva tanto en el interior de las consultas como en los espacios comunes.
Adalberto Suárez, subgerente de zona de Atención Primaria y miembro de la comparsa Sabrosones del Sabor, adelanta que «todo en este centro de salud recordará las carnestolendas, no sólo por rendir homenaje a esta fiesta señera, sino porque también sabemos que levantará el ánimo de los usuarios que estén en un momento delicado de salud». Las batas han sido donadas por diferentes murgas y parte del material sanitario es atrezo carnavalero, lo que añade una dosis de improvisación al trabajo diario de médicos y enfermeros, «dando siempre momento al chascarrillo y la risa que son tan propios de nuestro Carnaval». En las salas de espera habrá réplicas a tamaño real de los trajes de las Reinas y vídeos que irán pasando en bucle las galas de años anteriores.
Las diferentes áreas se identificarán con nombres relacionados con la fiesta, como las consultas de Pediatría «Los Chinchositos», el dispensador de Sintrom «Ni Fu Ni Fa» o el novedoso y experimental espacio «Rondalleros», dedicado a personas con trastornos graves del sueño. El personal de Administración atenderá siempre con pelucas, y pechos postizos en el caso de los administrativos; quienes pidan cita disfrazados tendrán un trato preferente, lo que desde la subgerencia se explica como «un incentivo para la población».
Desde el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife se muestran entusiasmados en este nuevo paso en la estrategia de progresiva carnavalización de la ciudad, que incluye proyectos futuros como los juzgados del Carnaval, el edificio de Usos Múltiples del Carnaval, las Fiestas de Mayo del Carnaval o el Salón de Plenos municipal del Carnaval, iniciativas todas que el Organismo Autónomo de Fiestas califica como «esenciales» para atraer el turismo.
Expertos calculan que hacia 2033, Santa Cruz de Tenerife será un Carnaval completo y perpetuo, una distopía de la que será imposible salir, que obligará a los chicharreros a que sigan bailando, sigan bailando, sigan bailando.