Desde el 1 de enero, las guaguas son gratis en Canarias. Esta medida, implementada tras el acuerdo entre CC y PSOE en Madrid, ha generado una cierta confusión, por lo que desde El Baifo Ilustrado intentamos aportar algo de luz centrándonos en las claves más importantes.
¿Pero y esto ahora por qué?
El acuerdo entre CC y PSOE se fraguó en Madrid hace unos dos meses; la rumorología lo atribuye a la necesidad de los socialistas de contentar a potenciales socios de Gobierno en Canarias si el Pacto de las Flores se marchita en mayo, o si los resultados de las generales hacen preciso el concurso de los diputados nacionalistas para apoyar al Gobierno. Rumores no menos maliciosos, por otra parte, señalan el origen del acuerdo en una comida copiosa y una mala digestión que dejó al ministro Félix Bolaños bajo de defensas para afrontar la encerrona que Fernando Clavijo, Ana Oramas y María Fernández le hicieron a la salida del hemiciclo.
¿Y será gratis para todo el mundo?
En principio, la medida beneficiará a los viajeros habituales, esto es, a los que hagan más de un determinado número de trayectos al mes, por ejemplo los titulares de los diferentes bonos nominativos, como los de estudiantes, los de jubilados, o los de residente. Quienes no hagan uso de estos títulos tendrán que abonar el desorbitado precio del billete, aprendiendo una valiosa lección. Se intentará, no obstante, que el precio del billete se mantenga siempre por debajo del precio del litro de gasolina, para estimular la movilidad sostenible.
¿Cómo van a controlar quién hace ese número de viajes al mes?
El consejero de Obras Públicas y Transportes, Chano Franquis, se encargará personalmente de cotejar los datos en unos servidores gigantes albergados en los sótanos de la Consejería, donde, ataviado con una sudadera con capucha, irá chequeando que cada persona que se beneficia de la gratuidad haya hecho el número de viajes mínimo. Eventualmente, podrá hacer inspecciones sorpresa para las que se esconderá detrás de los asientos de guaguas elegidas al azar. Las multas por beneficiarse de la gratuidad sin alcanzar el número de viajes y herir así los sentimientos de Franquis podrá ir desde los 500 hasta los 3.000 euros.
¿Habrá alguien dando información a los usuarios?
Un aspecto poco conocido del acuerdo entre CC y PSOE es que permite a los nacionalistas colocar en cada vehículo a una suerte de apoderado del partido, que irá informando a los pasajeros de que si van gratis en la guagua es porque CC ha conseguido esa bicoca para los canarios. Tan pronto como tuvo conocimiento de esta cláusula, el PSOE canario exigió poder incluir en las paradas a otro representante que explique que si la guagua le ha salido gratis al viajero es porque la generosidad y compromiso de Pedro Sánchez con los canarios no conoce límites. Recuerde que el chófer no puede dar información, porque es peligroso distraerle mientras conduce y porque posiblemente tenga aún menos datos que usted.
¿Funcionará igual el sistema en todas las Islas?
Cada territorio insular funciona, a efectos de transporte público, como un reino de taifas con sus propias reglas, pero cabe pensar que, por una maldita vez, esto tenga más o menos las mismas normas en toda Canarias.
¿Están las Islas preparadas para el aumento de viajeros que puede producirse?
Las Administraciones aseguran que han previsto escenarios de mayor carga de pasajeros, reforzando líneas y frecuencias, pero lo más prudente en estos casos siempre es adoptar una escéptica actitud de «ya si eso vamos viendo», y estar preparados, física y mentalmente, para viajar en el techo de la guagua si fuere necesario.