Como viene siendo habitual todos lunes, María Dolores de Cospedal compareció ayer ante los medios de comunicación para dar a conocer algo que no deje a nadie indiferente. En esta ocasión la secretaria general del Partido Popular anunció la presentación de una querella contra todas aquellas personas que en noviembre de 2011 dieron su confianza a la formación política que representa.
«Hay que recordar que durante aquella campaña electoral nuestro candidato a la presidencia del Gobierno no prometió ni ofreció absolutamente ninguna solución a los problemas de los ciudadanos, por lo que esos diez millones ochocientos treinta mil seiscientos noventa y tres electores cometieron un gravísimo acto de irresponsabilidad que no debe quedar impune. Ahora tenemos más de seis millones de parados y pareciera que la culpa fuera nuestra, cuando en ningún momento propusimos ninguna medida para reducir el desempleo ni para estimular la economía. Es por ello que esperamos que esta querella sea admitida a trámite y una vez celebrado el juicio los culpables reciban un castigo ejemplar», señaló de Cospedal.
Al ser preguntada por un periodista sobre como tenían previsto identificar a las personas que votaron al PP teniendo en cuenta que el voto es secreto, la también presidenta de Castilla La Mancha respondió sin dudar: «Es verdad que la democracia representativa tiene esas trabas y engorros que muchos no comprendemos. Pero no importa, tomaremos el censo utilizado en dicha convocatoria electoral y mediante un sofisticado programa informático sortearemos un número de electores igual al de los que erróneamente depositaron su confianza en nosotros en aquella ocasión. Y esas serán las personas contra las que irá dirigida la querella. Naturalmente todos nuestros militantes estarán exentos de entrar en dicho sorteo, a ellos no les podemos suponer esa mala fe. Y si los agraciados votaron por otro partido o ese día se quedaron en casa haciendo una barbacoa, mala suerte. La ciudadanía tiene el deber de ser comprensiva y hacer pequeños sacrificios en pos del interés general.»