Deogracias Diostesalve, más conocido como el santo ermitaño del Pinar ha pedido al Obispado de la Diócesis Nivariense que declare las comparecencias del Presidente del Gobierno como “apariciones marianas”.
El eremita, que lleva desde la retirada del Pollito de la Frontera retirado de lo que él llama “las tentaciones del mundo” nos recibe con su tradicional atuendo compuesto por hojas de palma, unas cholas del ciento cincuenta y una montera de color negro. Mientras fuma con deleite un cigarrillo “Krúger” negro sin filtro -“mi única concesión a los placeres mundanos”, nos aclara- expone los motivos por los que ha elevado tan extraña petición al dignatario eclesiástico:
“El Presidente Rajoy solo aparece en ocasiones muy contadas. Solamente transmite su mensaje a unos pocos elegidos, y lo hace de una forma críptica, como los misterios de Fátima. Anuncia grandes dolores y penas y nos promete una recompensa en el más allá si somos buenos y asumimos con cristiana paciencia las pruebas a las que nos somete. ¿Hay algo más mariano que las apariciones de don Mariano?” –concluye Diostesalve, entre calada y calada de un pitillo que ha dado al penitente un característico aliento a lagarto de Salmor en estado de putrefacción.
Iniciativa con extrañas hipótesis
Mientras en la sede del Obispado niegan cualquier conocimiento de la iniciativa de Deogracias y del propio Deogracias, los vecinos del Pinar aportan diversas teorías acerca de todo este asunto: según algunos, el eremita no tendría la condición de religioso sino que se trataría de un antiguo dirigente del Partido Popular en Canarias que, viendo desaparecidas sus expectativas de promoción en el seno del mismo o siendo parte de una corriente sin futuro (o ambas cosas) sufrió un colapso mental que le hizo revertir a un pasado perrofláutico del que no se tenía noticia (o quizá sí y por eso su anhelos se vieron truncados) mezclado con alguna experiencia como monaguillo. Según otros, estas declaraciones indicarían su deseo de recuperar el lugar perdido en la política mediante un acercamiento a Mariano Rajoy o bien el hecho de que estuviera definitivamente grillado.
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